-Remington en mano comienzo a contarle al oído, los diez dedos recorren impaciente todas y cada una de las teclas sin descanso, y el carrete de tinta pasa por completo de izquierda a derecha, una y otra vez
Hay a quienes se les platica, otros a quienes se les cocina, y algunos más a quienes se les corteja, pero para escribirles…para escribirles muy pocas, solamente a una; Ella es, ha sido y será la primera y la única
Tu nombre siempre al óleo y en cursivas, labios rojos comunistas, de corona las gerberas que algún día quisiera plantar en mi jardín
Nunca se me olvida que Mayo comienza en el segundo de sus días.
“Las piedras jamás Paloma…”
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario