Bellas Artes roba el aliento, aunque sea en la oscuridad de
la madrugada, a través del cristal de un autobús en movimiento sobre la soledad
de las calles vacías
Otra ciudad distinta adherida a la suela de mis zapatos,
otras tantas fotografías más sin afán de llegar en primer lugar al portarretrato,
todo para llevar, todo a la mano
Hay tantos lugares en los que me vendrían tan bien su par de
pies al lado de mis huellas, un café de Olla en San Miguel, un amanecer sin
prisa en La Bella Airosa, el resto de los años que le resten a una vida en
Guanajuato
Curiosamente siempre queda un puesto vacío justo al lado mío,
cuando son mi pasos quienes van de una lado al otro en lugares distintos a los que
asisto de unos meses a la fecha; Casualidades, cábalas, coincidencias?
Hace algunos kilómetros retomé aquella olvidada costumbre que
tenía de guardarme en la bolsa del pantalón alguna piedra del lugar en el que estuviera por vez primera, quizás con ello ahora espero llenar vacíos y dejar
que el peso de todas ellas juntas ó revueltas hagan lastre suficiente y me dejen fijo en un solo sitio
Se ha perdido de tantos soles pletóricos, de lunas llenas y
en cuarto menguante, se ha perdido de muchos parques, plazas llenas de personas
con rostros interesantes, de lugares mágicos que sin su risa y su cadencia al caminarlos
a un costado mío, terminan siendo solo eso, lugares.
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